"EL PACHANGA"
Una obra que explota la riqueza de la
tradición oral y el lenguaje popular del bajo Sinú
A
pesar de que muchas personas en el mundo hablan el español como su idioma de
pila, sería incorrecto afirmar que todos lo utilizan y lo interpretan de manera
similar; dependiendo del lugar y de las influencias culturales e históricas, el
idioma castellano tiende a adquirir un toque particular, o sea “un acento
autóctono”, que se caracteriza por poseer sus propias frases, palabras, dichos
y significados. En Colombia, el acento, la semántica y la conjugación que
utilizan los habitantes de la Costa Atlántica son totalmente diferentes a la
jerga común que emplean las personas que viven en el interior del mismo país,
provocando situaciones de incomodidad y leves problemas de comunicación cuando
se encuentran personas de ambas regiones, aunque las dos hablen el español. Lo
mismo ocurre cuando se compara el dialecto autóctono de las personas de la
región pacífica con aquellas de la zona amazónica, los llanos o las islas.
A
pesar de la extraordinaria riqueza de dialectos que existen solamente en
Colombia, cuando un autor se arriesga a escribir un libro, por lo general, echa
a un lado este aspecto singular que posee la lengua en su región y se limita a
escribir su texto es un español más global y generalizado. Por ejemplo; algunos
de los libros más famosos de la literatura universal redactados en lengua
española, como María de Jorge Isaac o la vorágine del escritor huilense José Eustasio
rivera, son obras que llevan al máximo grado la belleza y sutilidad, casi
poética, que se puede alcanzar con el idioma castellano, pero olvidan la
riqueza particular que tiene su propio dialecto autóctono.
Son
pocos los autores que han arriesgado a crear obras literarias experimentando con
los aspectos singulares y típicos de la forma como se habla cotidiamente en su
región; entre estos, se pueden resaltar David Sánchez Juliao, un reconocido escritor
nacido en Santa Cruz de Lorica – Córdoba y que se hizo famoso por obras como: “El
Flecha”, “Papá!! ¿Por qué me llevas al hospital en canoa? o “El Pachanga”; escritos
que rescatan y se apoyan sobre la tradición oral y el lenguaje tradicional de
la costa Caribe. Y es, este último libro:
“El Pachanga”; el que funcionará como eje central a partir del cual se
desarrollará el contenido de este ensayo. La intención, nos es realizar un
análisis profundo o crítico del contenido del libro, sino, describir la manera
como el autor explotó la inmensa riqueza del dialecto costeño y se aprovechó de
los aspectos socio-culturales que predominan en la vida diaria y popular de los
pueblos de la costa atlántica para crear esta obra.
Teniendo
en cuenta lo anterior: ¿Qué aspectos socio-lingüísticos de la cultura Caribe
colombiana se destacan en la obra “El Pachanga”?
El
Pachanga, es obra literaria jocosa y satírica que narra las andanzas y
desventuras de un personaje un poco insensato llamado José de Jesús Negrete “alias
pachanga” y su viejo carro de trabajo; la historia, que se desenvuelve en un
escenario típico de la costa; describe los pensamientos, las opiniones, las
criticas y las ambiciones de este hombre carismático en su afán de poder comer
algo y calmar su hambre. Toda la obra está envuelta en un ambiente autóctono,
que saca a flote la idiosincrasia, la jerga y la esencia cultural de los
pueblos rivereños de la zona norte del departamento de Córdoba, siendo
específicos, como lo hallados en los habitantes de la hermosa ciudad de Santa
Cruz de Lorica.
Aquel
que tiene la oportunidad de leer la obra “el pachanga” se encuentra con un
texto complejo y estructurado de una forma inusual que básicamente describe el
estereotipo de las personas que viven en esta región del país: principalmente su
comportamiento, su forma de relacionarse y de pensar; razón por el cual, este es
el primer aspecto que convierte a “El Pachanga” en una obra que rescata la
tradición oral y el lenguaje popular autóctono de la costa Caribe. El libro es
como un espejo que refleja el ser y vivir autentico del costeño, describiéndolo
como una persona jocosa, de extraño hablar, vulgar, irreverente, que no se
limita a contar lo que sucede, y que a pesar de sus problemas, disfraza sus
dificultades con risas.
David
Sánchez juliao en su obra “El Pachanga” aunque promueve una imagen de los
costeños ya popular en el resto del país también describe el estereotipo de las
personas de otras regiones del país, eso sí, desde el punto de vista en que lo
aprecian los habitantes de la costa. Por ejemplo: en el libro, el protagonista,
se refiere a los paisas y cachacos como tacaños, caminado extraño, nalguitas
escurridas, barbitas de chivo y cachetes colorados.
En
segundo lugar; otro aspecto que evidencia el uso la riqueza lingüístico –
cultural de la región Caribe dentro del escrito, es que la obra detalla muy minuciosamente la
forma de cómo hablan y se expresan los costeños. Los diálogos no están
redactados bajo un español universal y refinado, si no que están detalladas en
base a los elementos particulares del dialecto de las personas que viven en el
bajo Sinú, incluyendo la semántica, las palabras, los dichos, los refranes
propios de la jerga común las cuales tiene su significado y sentido propio en
este contexto. Por ejemplo; se resaltan palabras autóctonas como: MANDUCO, para referirse al dinero; PELA´O: que significa “niño”; BOCAITO: que quiere decir “poquito”; ÑAPA: que es una propina; BARRO:
para hacer entender que se falló en algo; entre otras. Y dichos como: “NO BAILAN NI DAN BARATO” que se usa
para referirse a las personas que no ayudan y que estorban al mismo tiempo;
también se pueden recalcar insultos originales de este pueblo como: JUEPUTA, ERDA y MANDAN GUEVO.
Para
finalizar, otro aspecto social –lingüístico autóctono que se evidencia en la obra (y el que mas es notoria)
es la forma como están escritos los diálogos. David Sánchez juliao no se
conformo únicamente en redactar sus diálogos
con el dialecto particular del costeño, sino que trasformó intencionalmente las
palabras (cambiando las letras, incorporando silabas nuevas) para que su
fonética fuera idéntica al modo real como es dicha por las personas del bajo Sinú.
Algunos de los casos más notorios es la incorporación de “J” para indicar la casi ausencia de de “S” en el hablar común del costeño; por ejemplo: EJTE = ESTE; EJ = ES; OTROJ = OTROS o la anulación de letras
para indicar como los costeños no termina sus palabras al hablar. Ejemplo: PA´= PARA, PUE = PUES. También se
denotan el uso de anagramas como BAJOTRA
= TRABAJO; españolización de palabras en Inglés como GUERLS = GIRLIS, YU NOU = YOU NOW. En fin, todos elementos
particulares que distinguen la jerga costeña, del resto del país.
A
modo de conclusión, la obra literaria “El Pachanga” es un escrito que se
caracteriza principalmente por el uso excepcional de las expresiones, las palabras
y los dichos coloquiales de la costa Caribe. El autor “David Sánchez Juliao” se
aprovecha la inmensa riqueza que se encuentra en el lenguaje pueblerino de la
ciudad de Lorica para crear una obra autentica, cuya narrativa no se preocupa
por alcanzar la perfección poética y estítica de la palabra; sino que por el
contrario, explotar la identidad cultural, social y lingüística que hace única
cultura.